18/8/08


Hace días que pienso
como sería entregarme.
Re veo la idea de subir aquella escalinata y sentarme en el pico mas agudo para deliberar el porque de ese pensamiento.
El trayecto es largo..el camino hacia el destino de la entrega, sin embargo se que a ambos nos cuesta de a ratos decir que no. Mi "no" no es difícil, te hago responsable por ese acto.
Aunque francamente no puedo culparte, porque aunque mi alma sea fuerte, el corazón y la carne con
"vos" se dejan llevar hacia la libertad.

Te otorgo la franja de mi intelecto que no deja de pensarte, a la cual se le hace sencillo recordarte todos los días un poco, mientras te espero, mientras vivo y sigo, porque también te cedo mi cuerpo y cada vez que al mirarte estalla mi sangre, te siento en mi carne, te uno al encuentro, te arranco y no miento al desearte, te extraño a lo lejos, busco tu reflejo, te miro y respiro.
Qué es eso de querer trasladarme hasta la orbe que lleva tu nombre?

No hay comentarios: